Los movimientos destinados a promocionar la igualdad de género están en auge. Hoy más que nunca, las mujeres siguen carreras laborales que antes se consideraban reservadas únicamente a los hombres. Pero ni siquiera en 2019, hay muchas mujeres que sueñen con ser plomeras. Heather Clark sí, y esa es ahora su profesión.
Tras graduarse en el Heanor Gate Science College con la especialización en construcción a los 16 años, Heather comenzó su carrera con un aprendizaje de cuatro años para después crear su propia empresa, Clark Gas Ltd. En 2019 Heather ya era una voz destacada en el sector de la plomería. Conoció al equipo de Wavin, parte del Grupo de Negocio Building & Infrastructure, cuando participó en una mesa redonda sobre el estado de la nación organizada por la empresa.
Heather es una entusiasta de la adopción de nuevas tecnologías como las que permiten a los clientes controlar su calefacción desde su celular. Por su propia experiencia, afirma que los clientes jóvenes son los que más abiertos se muestran a utilizar controles basados en aplicaciones, que les permitan hacer cosas como encender la calefacción cuando no se encuentran en casa. Sin embargo, estos cambios posiblemente resulten intimidatorios para los clientes de mayor edad, ya que les pueden parecer difíciles de utilizar, por lo que acaban volviendo al programador mecánico de siempre.
Uno de los efectos del cambio climático que afecta a los plomeros es el incremento, cada vez mayor, de las temperaturas. Para este sector eso significa menos averías en las calderas. Y para los plomeros, menos trabajo. Cuando Heather se dio cuenta de que la demanda de reparaciones de calderas estaba disminuyendo, decidió cambiar su enfoque y comenzó a formarse en el campo de las energías renovables gracias a un compañero de la industria que despertó en ella el interés por esta área. Hoy dedica gran parte de sus de sus actividades a la instalación de bombas de calor, paneles solares y otros elementos. Centrarse en las energías renovables le brinda la oportunidad de combinar su éxito empresarial con el cuidado del medio ambiente.
«Una vez estaba junto a mi camioneta haciendo un trabajo cuando una mujer se paró a preguntarme qué estaba haciendo. Le expliqué que era plomera. Y exclamó: "¡Eso es fantástico! Voy a apuntarlo en mi diario. ¡Hoy conocí a una mujer plomera!"».
- Heather Clark
Muchos clientes prefieren plomeras
Heather se ha enfrentado a las dificultades que significa ser mujer en un mundo tradicionalmente masculino. En Estados Unidos, solo el 1.4% de los plomeros son mujeres (Oficina de Estadísticas Laborales de EE. UU.), mientras que en el Reino Unido esta cifra no llega al 1% (Oficina de Estadísticas Nacionales del Reino Unido).
Una investigación realizada por la organización británica WaterSafe mostró que casi una tercera parte de las clientas preferirían que su plomero fuera una mujer. Heather cree que además del conocimiento del producto y las competencias para realizar el trabajo, el requisito más importante aquí es la paciencia, así que las mujeres suelen ser grandes plomeras. Dada la rápida urbanización y la creciente demanda de viviendas, Heather augura un gran futuro para el sector, sobre todo para aquellas personas que, como ella, entienden el valor de la tecnología y las energías renovables.